Tritones; ondinas y nereidas y demás criaturas del mar son los protagonistas de esta deliciosa selección de cuentos fantásticos de la gran escritora norteamerica, Louisa May Alcott, célebre por su novela Mujercitas. Una niña que quiere ser sirena, una sirena que quiere ser niña, y niñas confundidas con sirenas, protagonizan “Ariel”, “Sirenitas”, “Rizo, la ninfa del mar”, y “La amiguita de Fancy”, cuentos donde se reclama por un lado la importancia de la imaginación, y por otro, la de la realidad más práctica. Casi todos ellos comparten elementos de un mismo escenario —la isla y el faro, el hotel y las villas playeras—, probablemente inspirados en Nonquitt, el retiro veraniego de Alcott en la costa de Nueva Inglaterra. También encontramos aquí la única historia fantástica de Alcott que trata el tema de los prejuicios raciales, tan importante en su vida, o sátiras sobre sus propios dramas escritos para adultos.
Hoy os traigo la reseña de una preciosa antología en la que todas las historias tienen algo en común; el mar y un faro. Son historias cortas, pero con las que he disfrutado mucho. Posiblemente os suene el nombre de su autora, y es por su conocida obra “Mujercitas”.
Siempre suelo hacer un pequeño resumen de la historia, pero como son siete historias, escribiré brevemente sobre ellas en general.
La antología comienza con Ariel o una leyenda del faro. Se trata del cuento más largo y se centra en la relación del joven Philip Southesk con una “sirena” que vive en el faro. El segundo
El color no supone ninguna diferencia; los zarapitos son grises, las focas son negras y los cangrejos amarillos; pero no nos importa, y todos somos amigos. Es muy injusto que te traten de esa manera.
La trama de esta antología es emotiva, fantástica, logrando hacerte soñar con criaturas míticas y diversas aventuras. Hay historias sobre la pérdida, la confianza, prejuicios raciales y sátiras.
Las historias están narradas en tercera persona y como ya he dicho se dividen en siete, siendo el primer relato el de mayor extensión, no olvidando que el libro consta tan solo de 220 páginas.
La pluma de la autora es exquisita y aunque tiene expresiones un tanto antiguas, nos encontramos a pie de páginas con su significado para que no nos perdamos a lo largo de la historia. Pero la traducción también cuenta con palabras algo rebuscadas, que podrían echar para atrás a niños y adolescentes. Todos los cuentos tienen una pequeña moraleja que nos hace reflexionar.
Recuerda hijo mío: el orgullo precede siempre a la caída.
La edición es preciosa. Eso sí, yo al principio creía que se trataba de un libro con ilustraciones, pero no las trae. Además el libro es de bolsillo y muy pequeñito; de alto mide igual que mi mano.
Como conclusión, es una lectura agradable, relacionada con el mar y con historias con enseñanzas y moralejas que te harán reflexionar.
¿Conocíais este libro? ¿Lo habéis leído? ¿Os gusta este género?
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